Los pedales automáticos, el nexo entre el biker y la bicicleta.

Los pedales son ese fino nexo de unión entre nosotros y la bicicleta, encargados de trasmitir toda nuestra fuerza a las bielas, y de mantenernos sobre nuestra bicicleta. Podemos tener una bici mejor o peor, pero del buen o mal funcionamiento de los pedales  dependerá que nuestra ruta sea una delicia o sea un infierno. Y es que aunque muchas veces los bikers tendemos a no prestar demasiada atención a los pedales la realidad es que son una de las partes básicas de la bicicleta y condicionan nuestro rendimiento sobre la misma.

A un recién llegado al mundo de la bicicleta puede parecer que los pedales automáticos llevan toda la vida el mundo del ciclismo, sin embargo no es así, antes de la existencia de los pedales automáticos la fijación de la zapatilla al pedal se realizaba mediante rastrales y correas. Los pedales automáticos SHIMANO pedaling dinamics o SPD, fueron lanzados por Shimano en 1990 como adaptación al ciclismo del sistema de fijaciones de los esquís de nieve, la  gran novedad no era tanto el sistema y su forma, sino el tamaño de las calas que permitían el uso de un calzado con un aspecto relativamente normal y que permitía caminar. 

El éxito ha sido tal que desde entonces a día de hoy se mantienen como líderes absolutos del mercado de pedales automáticos para bicicletas siendo los pedales Shimano los que están presentes en una inmensa mayoría de bicicletas que ruedan por el mundo.

La gama de pedales Shimano nos ofrece un amplio catálogo tanto para mountainbike como para carretera y una amplia variedad de modelos. En toda la gama el funcionamiento es simplemente perfecto desde la gama más económicas hasta la más cara, diferenciándose más por peso y materiales utilizados que por funcionamiento, lo que nos puede dar una idea de la calidad del producto y su funcionamiento. La mayor parte de los modelos y gamas, se pueden ver en esta página, y así podrás hacerte una idea de cuál es el más conveniente para tu ritmo y práctica e incluso hacerte con unos.

El funcionamiento de los pedales Shimano SPD es sencillo, la dureza la ajustamos mediante un tornillo allen que permite ajustar cada una de las caras del pedal, y enganchar y desenganchar la cala del pedal es tan sencillo como realizar un pequeño giro de la parte trasera del pie para desenganchar el pedal y pisar con fuerza para enganchar el mismo, pudiéndose dejar el ajuste muy suave para los bikers novatos y así permitir un fácil desenganchado en caso de caída. Los pedales automáticos son ideales para evitar problemas en las rodillas derivado de nuestra posición al pedalear.




El mantenimiento de los pedales Shimano es prácticamente nulo, sus rodamientos internos son sellados, limitándose a engrasar el muelle de juste de dureza para permitir un correcto enganche y desenganche del pedal y a  la limpieza regular de los mismos, siendo con eso suficiente para darnos kilómetros y kilómetros de satisfacciones y buen funcionamiento. Tras casi veinte año montando en bici, y habiendo probado diferentes tipos de pedales y sistemas, pocas cosa nos han convencido tanto como los pedales SHIMANO SPD. Suponen un valor seguro que no te va a dar problemas desde el primer al último día, salvo verdadera mala suerte. Nosotros lo tenemos claro y son siempre nuestra primera elección a la hora de comprar unos pedales.