Más de mil aficionados han colgado el cartel de sold out de la L’Étape Madrid by Tour de France

Han pasado tres meses exactos desde que Bilbao se convirtió en la capital mundial del ciclismo. Las tres provincias del País Vasco fueron protagonistas de una salida histórica del Tour de France. La segunda vez que la gran ronda francesa daba la salida desde frontera española. La primera en más de tres décadas.

 

Fue una edición marcada por el dominio de Jonas Vingegaard, la batalla presentada por Tadej Pogačar o las victorias de etapa españolas de Pello BilbaoIon Izagirre y Carlos Rodríguez. Pero la Grande Boucle es mucha más que sus tres semanas de competición.

 

En todo lo que rodea de mística, historia, eventos y celebración al Tour de France, hay que destacar el papel de las marchas L’Étape by Tour de France. Y, en 2023, había una de ellas más especial que el resto en el calendario: L’Étape Madrid by Tour de France presented by UNIVERSAE.

 

Más de mil aficionados se han reunido hoy en Villanueva del Pardillo para enfrentarse a este desafío. El objetivo era superar 153 kilómetros y más de 2.500 metros de desnivel acumulado. Pero, por encima de todo, el objetivo era honrar al Tour de France en el año en el que la gran ronda francesa nunca quiso abandonar España.

LA FIESTA DEL SÁBADO

 

Antes de tomar la salida, todos los participantes pudieron vivir esa magia de color amarillo que supone el Tour de France. El Village que se organizó el día anterior en la propia Villanueva del Pardillo sirvió de centro de operaciones para el pelotón.

 

Además de la recogida de dorsales, la entrega del maillot exclusivo de la prueba diseñado por Atika y poder compartir tiempo en los stands de cada patrocinador, el sábado estuvo marcado por el Family Ride que organizó AEDAS Homes.

 

Esta pequeña marcha cicloturista está pensada para los más pequeños, que pueden rodar durante un puñado de kilómetros junto a sus padres. Una forma de fomentar el ciclismo y las formas de movilidad alternativas y sostenibles entre los jóvenes.



Almenara, La Escondida, Santa María de la Alameda y Robledondo. Cuatro puertos míticos de la geografía madrileña que han puesto la dureza en la marcha. Un recorrido similar al de la etapa 20 de esta edición de La Vuelta, que ha sido una de las más emocionantes que se recuerdan recientemente en la gran ronda española.

 

Superados estos retos, bien avituallados y con la satisfacción de haber completado el desafío, todos los participantes han llegado a la meta de Villanueva del Pardillo. Dos de ellos lo han hecho como Rey y Reina de la Montaña, premios a los mejores escaladores, y otro lo ha hecho como mejor sprinter de la prueba, en un tramo de un kilómetro cronometrado. Pero todos y cada uno de los más de mil participantes que han cruzado la meta han ganado. Han sido ganadores por haber completado la marcha y por haber contribuido a hacer de este 2023 el año del Tour de France en España.


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