MUSSARA SALOU CELEBRA SU DÉCIMO ANIVERSARIO CON UNA MAREA ROSA DE 3100 CICLISTAS

Concluye un fin de semana de emociones, alegría, muchas actividades y, por encima de cualquier otra cosa, de bicicleta. La Mussara Salou ha celebrado el décimo aniversario de la marca con dos días pensados por y para los ciclistas.   Hoy, domingo, han sido más de 3.000 los ciclistas que han completado la marcha en cualquiera de sus tres modalidades: 110, 147 y 205 kilómetros. Un día increíble que ha tenido como centro de operaciones esa ciudad maravillosa en plena Costa Daurada que es Salou.   Pero todo empezó mucho antes, con un sábado en el que la Plaça de les Comunitats Autònomes acogió la feria previa al evento, en la que hubo prueba de producto, actividades con patrocinadores y, por supuesto, un encuentro con Luis León Sánchez, embajador de la marca.   Ese sábado, el exciclista profesional, ganador de cuatro etapas en el Tour de Francia, compartió un rato con todo el pelotón de Mussara, en los que dio consejos, firmó autógrafos y habló de todos sus años como profesional. ‘Luisle’, eso sí, no se ha querido perder el colofón de la fiesta y ha salido como uno más de los participantes hoy

3.100 HISTORIAS   Porque el domingo ha sido el día que los miles de participantes en la carrera llevan esperando desde hace meses. Da igual qué recorrido hayan elegido o cuál haya sido su ritmo en carrera. Todos ellos tienen su propia historia y una pasión por la bicicleta que son inconfundibles.   Así, la marea rosa ha salido junta desde Salou a la misma hora: las 7.00 de la mañana. Desde allí, todos ellos han compartido desafío, carretera y recorrido hasta ese primer puerto que da nombre a la carrera: el Coll de la Mussara. Una subida que es ya historia del cicloturismo nacional y que es de paso obligado en los tres formatos.   Allí los caminos se han separado. Los hay que han elegido la ruta más corta, con 110 kilómetros y tres puertos; pero también están los que han optado por la opción más exigente, de 205 kilómetros, cinco puertos y más de 3.200 metros de desnivel positivo acumulado.   Esto es una seña de identidad de la marca. En los 10 años que han pasado desde que empezó la primera Mussara, en 2014, el lema de ‘Ciclismo sin condiciones’ ha ido siempre de la mano de la prueba. Una forma de entender la bicicleta: todos y todas caben, sin importar el tipo de ciclista que sea ni la distancia que afronten. Una filosofía que ha venido acompañada de ese ‘Profesionalmente amateurs’ que también caracteriza a la marca y que entiende que hasta el cicloturista más casual se merece una marcha profesional del mejor nivel.   Así, cada uno por su ruta y a su manera, todos terminaron confluyendo en el mismo punto: la meta final, también situada en Salou. Es allí donde se compartieron risas, anécdotas y celebraciones. También se celebró el tradicional ‘pasta party’: un lugar de encuentro pensado para que los participantes repongan fuerzas y compartan historias.

UNA FIESTA SOSTENIBLE   La ‘pasta party’ marca siempre el final de la fiesta y es un ejemplo también del compromiso de Mussara con la sostenibilidad. Toda la comida y bebida con la que ha provisto esta comida final y todos los avituallamientos ha sido proporcionada por productores locales, reduciendo así el impacto ecológico. Además, los alimentos sobrantes han sido entregados a iniciativas sociales de los municipios de paso de la prueba.   Son solo algunas de las muchas acciones que han llevado a cabo a lo largo de todo el fin de semana. Una de las máximas del evento ha sido el respeto medioambiental y la sostenibilidad social: demostrar que el ciclismo está ligado al entorno en el que se rueda y respetar ese ecosistema de forma innegociable.   Del mismo modo, todo el material que se ha preparado para la carrera, como lonas y cartelería, se ha hecho con material sostenible y ecológico.   Todo ello pensando en el respeto y cuidado del medio ambiente. Porque a través del respeto del entorno es la única manera de que dentro de otros 10 años Mussara siga con la misma salud y pueda celebrar, con orgullo y miles de ciclistas, su vigésimo aniversario.